Supervisores del OEFA verificaron la instalación de la grapa para contener la fuga de petróleo
El Organismo de Evaluación y Fiscalización Ambiental (OEFA), organismo adscrito al Ministerio del Ambiente (Minam), estimó que el petróleo crudo derramado, desde el 18 hasta el 27 de enero del 2023, ante la emergencia ambiental ocurrida el 18 de enero a la altura del kilómetro 390+184 del tramo II del Oleoducto Norperuano, equivale a aproximadamente 3,600 barriles o 151,200 galones.
De igual manera, los supervisores del OEFA han constatado que el petróleo crudo se ha desplazado aguas abajo del punto del derrame, siguiendo el cauce de agua de la quebrada Kañamas, río Chiangos, río Nieva y río Marañón, alcanzando una longitud aproximada de 222 km hasta la localidad de Saramiriza.
Bajo la supervisión de la entidad se ha logrado verificar la instalación de la grapa a cargo del equipo técnico de la empresa Petroperú en el punto en el que se produjo el atentado, además, se verificará la implementación del Plan de Contingencia, que incluye acciones de control, contención, recuperación de hidrocarburos y limpieza de la zona dañada.
Tras el grave daño ambiental producido por el derrame de petróleo, el OEFA, como organismo fiscalizador ambiental, se comprometió a continuar con su labor de supervisión e informar oportunamente los resultados de sus acciones de campo.
Cabe recalcar que a la fecha el ONP se encuentra paralizado desde febrero de 2022 (sin bombeo de petróleo crudo), el derrame de petróleo es la pérdida del petróleo remanente que se encuentra en el ducto.
El OEFA recordó que cualquier derrame de crudo genera daños ambientales y puede afectar a las comunidades cercanas cuya fuente de consumo es el agua de los cuerpos de agua potencialmente afectados.
