Vecinos, no arriesguemos a nuestras familias jugando con nuestra salud

Orgullosos estábamos al inicio de ver calles vacías ¿Y ahora?

Después de ver hoy la cantidad increíble de gente en las calles, espero que “mañana” no empiecen a:

– Culpar a las autoridades.

– Quejarse por la falta de atención en los hospitales a causa de su colapso.

– Culpar a las autoridades por el aumento de las cifras o contagios.

– Quejarse por las medidas extremas que puedan tomar las autoridades.

– Quejarse cuando el presidente indique 15 DÍAS MAS DE CUARENTENA!!!

La verdad que nunca antes fue tan fácil poder hacer algo por nuestro país, por nuestras familias, por nuestros amigos, por nuestros hijos, nuestros seres queridos o incluso por nuestro prójimo en general. Nunca antes tuvimos la mejor oportunidad para sentirnos orgullosos de algo; algo que podamos decir luego: ¡¡¡YO LO HICE!!!

¿Y que es ese algo?, pues simple: Quedarnos en casa.

Todos hemos quedado atónitos al escuchar o leer la entrevista que le hiciera Jaime Chincha (reportero de RPP) al actual Ministro de Salud, el Sr. Víctor Zamora, donde manifestaba (entre otras cosas), que se está creando un grupo especial de levantamiento de cadáveres, increíble pero cierto. Estemos de acuerdo o no con lo dicho, sabemos y somos conscientes que no somos inmunes, que nuestra sangre inca o pre inca en el caso de los chachapoyanos no es suficiente para, creernos inmortales.

Ha pasado más de 3 semanas de cuarentena y tenemos sólo dos opciones:

1: Salir a la calle con cualquier pretexto (se han visto casos de personas que al ser intervenidas por la autoridad han indicado que salieron porque querían comprar una gaseosa, increíble) y contraer el virus e infectar a nuestras familias.

2: Simplemente quedarnos en casa y cuidarnos respetando plenamente la cuarentena; esto además demostraría no sólo el amor que uno siente hacia los suyos, sino además que no somos indiferentes a nuestro pueblo, que ya suficiente tiene con la dejadez de nuestras autoridades, quienes no asumieron su responsabilidad a tiempo.

Vivir o morir, es en lo que se está resumiendo el problema ahora. ¡Si ahora nos toca “incomodarnos” por las medidas extremas, pues entonces hagámoslo!, seamos responsables para volver a tener nuestra vida de antes, sobre todo con lo más importante: nuestra salud; porque una vida sin salud, es una vida incompleta.

Por: Alan Chávez Jauregui

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