Universitario, en su campo, y ante un difícil Cerro Porteño, buscó sacar un buen resultado, para que le permita seguir soñando en esta Copa Libertadores. Pero, para sus intereses, terminó empatando a uno.
En la previa, los jugadores de Universitario buscaron, mediante redes sociales, hacer llegar el deseo de que sus hinchas los acompañen en este partido que era crucial para ellos. Y se notó. Un estadio con más de 20 mil hinchas que llegó con la ilusión de ver triunfar a su equipo. Ya en el partido, tuvo un inicio con dominio del cuadro paraguayo, con Nelson Haedo Valdez como bandera de ataque, el plan pasó por buscar siempre al experimentado delantero para que se gane ante los centrales cremas: Federico Alonso y Nelinho Quina. Poca claridad tuvo en ataque la U, pero encontró en Donald Millán y Alejando Hohberg algunos chispazos que le permitió llegar sobre el arco visitante. Cerro Porteño, por su lado, firme siempre en la idea de mantener una solidez defensiva para no sufrir un gol.
En la segunda parte cambió todo cuando los dirigidos por Gregorio Pérez abrieron el marcador gracias a un buen centro de Hohberg que encontró al delantero Jonathan Dos Santos que con un soberbio cabezazo abrió el marcador. La ilusión se empezaba a dibujar en los rostros de los hinchas que, ansiosos, esperaron el segundo gol. Pero, todo cambió minutos después ya que luego de un tiro libro ejecutado por la visita, llevó complicaciones sobre el arco de José Carvallo que en su intención de retener el balón, dejó el rebote que fue bien aprovechado por Óscar Ruiz, qué piso el área solo y definió bien ante el portero peruano. Por más que la U buscó quedarse con el partido, Cerro no dejó de mostrar solidez y tranquilidad con el dominio de la pelota, eso lo sufrió más el cuadro crema.
Ahora, el equipo peruano buscará dar la hazaña y buscar una victoria ya que el empate (0-0), le conviene a Cerro. El equipo de Gregorio Pérez, que ha mostrado momentos de buen fútbol y busca consolidarlo, no tendrá que cometer errores en Paraguay ya que le puede costar muy caro.
Por: Larry Jalk