Las personas con enfermedades cardiovasculares, incluyendo la hipertensión arterial, tienen tres veces más riesgo de morir como consecuencia de la COVID-19, en comparación a las personas que no padecen problemas cardÃacos, informó la Dirección General de Intervenciones Estratégicas en Salud Pública (Dgiesp) del Ministerio de Salud (Minsa) en el marco del DÃa Mundial del Corazón.
En el contexto actual de la pandemia por la COVID-19, los casos de enfermedades cardiovasculares han incrementado debido a los cambios en el estilo de vida de las personas, ocasionado por el teletrabajo, el aumento de la ingesta de alimentos chatarra y la falta de actividades deportivas al aire libre.
Ese sentido, el doctor Jorge Hancco, especialista en medicina preventiva del Minsa, y la doctora Victoria Armas, cardióloga clÃnica del Hospital Nacional Arzobispo Loayza, destacaron la importancia de adoptar un estilo de vida saludable que incluya actividad fÃsica diaria, una alimentación rica en frutas y verduras y que elimine el consumo de tabaco.
“Lo ideal es que los momentos de actividad fÃsica sean momentos agradables y de entretenimiento, quizás en compañÃa de amigos o familiares”, agregó.
Por su parte, la doctora Victoria Armas remarcó la necesidad de prevenir y controlar factores de riesgo como la hipertensión arterial, la diabetes y la obesidad. “Si la enfermedad cardiovascular no se controla a tiempo adecuadamente puede ocurrir un infarto, accidentes cerebrovasculares (ACV) y problemas renales, ocasionando con el tiempo falla cardÃaca y hasta la muerte súbita”, advirtió.
“Si venimos de una familia que tiene enfermedades cardiovasculares, las probabilidades desarrollar estas afecciones son altas. En ese caso es necesario iniciar chequeos preventivos a temprana edad con un electrocardiograma, medida de la presión arterial y glucosa”, recomendó Armas tras precisar que los exámenes preventivos de salud cardÃaca deben realizarse desde los 35 años en varones y 40 en mujeres.