Con el objetivo de contribuir a mejorar la atención en clases, la asistencia escolar y los hábitos alimenticios de la población escolar, el Programa Nacional de Alimentación Escolar Qali Warma, del Ministerio de Desarrollo e Inclusión Social, proporciona una amplia gama de alimentos nutritivos, de calidad e inocuos para el consumo de los escolares.
Mediante los Comités de Alimentación Escolar, que operan con el modelo de cogestión, se entrega mensual o bimensualmente dependiendo de la ubicación geográfica una dotación de alimentos a las madres y padres de familia para que los preparen en sus hogares y sean consumidos por los estudiantes, a manera de acompañamiento de sus clases no presenciales.
En la planificación del menú escolar se consideran algunos criterios: si el escolar pertenece a inicial, primaria o secundaria, si el colegio usuario se ubica en los quintiles de mayor o menor pobreza, entre otros factores, y también es muy importante la pertinencia cultural.
Por eso se incorporan alimentos que responden a los hábitos y patrones alimentarios regionales. En regiones como Huancavelica, por ejemplo, se distribuye el charqui de alpaca entre otros alimentos, que por su rico sabor y por ser un alimento vigente en las mesas huancavelicanas.
En la región San Martín se distribuye conserva de mollejitas de pollo, fuente de proteína de alta calidad para enriquecer la dieta de miles estudiantes de la zona, pues las proteínas son cruciales para el crecimiento, el desarrollo y el mantenimiento del cuerpo.
En regiones como Pasco, el trigo forma parte del servicio alimentario escolar. Este cereal no es solo un alimento milenario, sino también nutritivo. Brinda una importante cantidad de carbohidratos y aminoácidos esenciales para el organismo.
Mientras, en Puno se distribuye la quinua, considerada un superalimento por su alto contenido de nutrientes.
Los alimentos que se distribuyen para el consumo de los escolares usuarios son elaborados a base de especificaciones técnicas exigidas por la autoridad sanitaria y el programa, en consonancia con la Ley de Alimentación Saludable. De esa manera, están libres de octógonos, es decir, no superan los límites establecidos de azúcares y grasas.
Fuente: El Peruano