Nacido en Huambo, Amazonas, Arista se presenta como un economista de renombre, pero su historial de acusaciones que lo persiguen
José Berley Arista Arbildo juró como nuevo ministro de EconomÃa y Finanzas, en reemplazo de Alex Contreras, en medio de una recesión económica.
Nacido el 18 de agosto de 1959 en Huambo, Amazonas, Arista es un economista con una larga trayectoria en el ámbito público y polÃtico.
Su carrera en el servicio público comenzó en 1990 cuando asumió el cargo de Director Nacional de Presupuesto Público del Ministerio de EconomÃa y Finanzas.
Desde entonces, ha ocupado diversos roles clave en la administración pública, participando en la creación de instituciones como la Superintendencia Nacional de Administración Tributaria (Sunat) y el Servicio de Administración Tributaria (SAT).
En el ámbito polÃtico regional, Arista fue elegido presidente regional de Amazonas en 2010, liderando la región durante el perÃodo 2011-2014.
Sin embargo, su gestión estuvo marcada por controversias y acusaciones de malversación de fondos públicos.
La procuradorÃa lo acusó de malversación de casi 5 millones de soles en Amazonas, asà como de omisión de denuncia y delitos relacionados con proyectos de infraestructura.
A pesar de estas acusaciones, Arista ha escalado puestos importantes en la administración pública, ocupando cargos como Ministro de Agricultura y Riego y brevemente como Ministro de EconomÃa y Finanzas durante el fugaz mandato de Manuel Merino.
Arista también ha representado al Perú en el ámbito internacional, ocupando cargos como director del Banco de la Nación, gobernador alterno del Banco Interamericano de Desarrollo (BID) y director de la Corporación Andina de Fomento (CAF), lo que ha consolidado su visión global y su capacidad para establecer relaciones internacionales en el ámbito económico.
Su designación como Ministro de EconomÃa y Finanzas ha generado debate y controversia debido a su historial en Amazonas, donde enfrenta investigaciones por presuntos actos de corrupción.
Las investigaciones sobre las acusaciones en su contra continúan en curso, lo que añade un elemento de incertidumbre a su gestión como Ministro de EconomÃa y Finanzas.
