A pesar de la conclusión anticipada del contrato con Joinnus, se garantiza la continuidad del servicio, ahora a cargo de la Secretaría de Gobierno Regional
Tras varios días de paralización en la ciudad de Cusco, específicamente en Machu Picchu, un sector de la población, en desacuerdo con la implementación de un sistema de ventas por internet de entradas para el Santuario Arqueológico de Machu Picchu, decidió levantar la medida de fuerza.
La huelga, que inició el 25 de enero, generó pérdidas millonarias en toda la cadena turística, afectando tanto a servicios de transporte como a negocios vinculados al turismo.
El conflicto se originó por la tercerización de la venta de boletos electrónicos a través de la empresa Joinnus, lo que llevó a la suspensión de servicios y bloqueos de carreteras, causando inconvenientes a turistas nacionales e internacionales que quedaron varados sin poder acceder a la ciudadela incaica.
La Fiscalía Provincial Corporativa Especializada en Delitos de Corrupción de Funcionarios de Cusco intervino la sede de la Dirección Desconcentrada de Cultura (DDC) de Cusco durante el desarrollo de la huelga.
Luego de intensas negociaciones, se llegó a un acuerdo entre los representantes del Gobierno y los sectores que iniciaron la paralización. Según el comunicado, se implementará un nuevo sistema de venta de entradas administrado por el Gobierno Regional Cusco y la Secretaría de Gobierno y Transformación Digital de la PCM, poniendo fin a la tercerización con Joinnus.
El levantamiento de la huelga fue anunciado junto con la promesa de un sistema de venta transparente y amigable, con la participación activa de las autoridades locales. Werner Salcedo Álvarez, representante gubernamental, destacó que el nuevo proceso busca descentralizar y desarrollar la región de Cusco.
El alcalde de Machupicchu, Elvis La Torre Uñaccori, elogió la madurez política de la población y expresó la reapertura de la Llaqta Inka para visitantes nacionales y extranjeros.
El acuerdo contempla la continuidad del servicio de venta de boletos a cargo de la Secretaría de Gobierno Regional, tras la conclusión anticipada del contrato con Joinnus. Además, se comprometen a incorporar a las comunidades locales en el proceso y a explorar nuevos accesos turísticos.
Este paso adelante es crucial para la reactivación del turismo, considerando el impacto económico negativo que la paralización generó, estimado en 3.5 millones de soles diarios.
Se espera que el próximo 10 de febrero, en una reunión de la Unidad de Gestión de Machupicchu, ministros y autoridades de la región Cusco trabajen en las demandas de los pobladores locales.
