Según Renzo Reyes de StartUPC, la proporción de emprendedoras ha crecido de un 20% a un 40% en los últimos tres años
En los últimos años, el emprendimiento femenino en diversos sectores económicos de Perú ha experimentado un notable crecimiento, logrando resultados destacados en el mundo de los negocios.
Este fenómeno se atribuye a ciertos rasgos distintivos de la mujer emprendedora peruana, como la meticulosidad, habilidades de negociación, determinación, manejo emocional excepcional y la aplicación de habilidades blandas.
Según el Director de StartUPC, Renzo Reyes, las startups lideradas por mujeres han experimentado un aumento significativo en los últimos tres años. Anteriormente, el 80% de los emprendedores eran hombres y el 20% mujeres, pero, en la actualidad, la proporción ha cambiado a aproximadamente un 40% de mujeres y un 60% de hombres. Sin embargo, destaca que los hombres aún lideran más emprendimientos tecnológicos.
Reyes explica que, aunque el ecosistema emprendedor tiene mucho por avanzar, se observa un cambio positivo, ya que más mujeres se atreven a liderar, inspiradas por el éxito de otras emprendedoras destacadas.
Empresas como Manzana Verde, liderada por Larissa Arias; Fitco de Andrea Baba; Sicurezza de Ileana Tapia; y Emptor con Oriana Fuentes, son ejemplos de startups lideradas por mujeres peruanas que están cosechando éxitos a nivel nacional e internacional.
Para fomentar el emprendimiento liderado por mujeres, Reyes destaca la importancia de reconocer y visibilizar sus iniciativas. Además, sugiere rescatar historias de éxito y promover el liderazgo femenino desde la educación escolar, abogando por una revolución educativa que refuerce la confianza de las mujeres en sus habilidades de liderazgo desde una edad temprana.
El e-commerce se ha destacado como el sector con mayor participación femenina en el emprendimiento actual. Muchos de estos proyectos son plataformas multicanal, marketplaces de alimentos saludables o utilizan Software as a Service (Saas), atribuyendo ese impacto de la pandemia y a la creciente innovación en el ámbito digital de los negocios.
A pesar de estos avances, se reconoce que el ecosistema empresarial sigue siendo predominantemente masculino en posiciones estratégicas. Sin embargo, la creciente presencia de mujeres en tecnología ofrece una oportunidad para que más de ellas se aventuren en el emprendimiento sin temor a que su capacidad de liderazgo sea cuestionada.
