Han sido muchas las declaraciones escépticas del mandatario brasileño, quien llegó a calificar a la enfermedad como una “gripecita”.
El presidente Jair Bolsonaro anunció hoy que padece de coronavirus. Ya había anunciado un día atrás que se encontraba mal de salud y que le faltaba el aire por lo que había dispuesto hacerse la prueba de descarte. Esta mañana el mandatario confirmó ser positivo, aunque fiel a su estilo recalcó sentirse “bien”.
“Comenzó el domingo con una breve indisposición”, dijo el propio mandatario a periodistas en su residencia oficial, quien aseguró que ahora se siente “perfectamente bien”, al punto de que informó sobre el resultado del examen conversando con los reporteros a menos de dos metros de distancia, aunque con la máscara preceptiva.
Y con la confirmación Bolsonaro podría poner fin a una historia de escepticismo frente al virus al cual días atrás calificó de “gripecita”.
TANTAS VECES BOLSONARO
Fue a fines de marzo, cuando la amenaza del coronavirus ya se había cobrado varias vidas en China y amenazaba en convertirse en pandemia cuando Bolsonaro lanzó su primer disparo.
“En mi caso particular, por mi historial de deportista, en caso de que fuera contagiado, no necesitaría preocuparme. Nada sentiría, como mucho, una gripecita o un resfriadito”, manifestó el presidente. Bolsonaro repetiría este discurso innumerables veces, siempre desestimado a la enfermedad.
BRASIL NO SE CONTAGIA
Días más tarde, mientras ya otras naciones sudamericanas empezaban sus confinamientos, Bolsonaro salió a señalar que su país sería ajeno al coronavirus.
“El brasileño tiene que ser estudiado. Él no se contagia. Le puede ver saltar a una alcantarilla, bucear, ¿verdad? Y nunca le pasa nada. Yo creo que hay mucha gente que ya se ha contagiado en Brasil y ya tienen los anticuerpos que ayudan a que no siga proliferando”, puntualizó.
VAN A MORIR
En otro momento Bolsonaro también daría muestra sobre su posición frente a la pandemia. Cuando tuvo la oportunidad no dudó en advertir a su país que si bien se reportarían muertes, él prefiería que la actividad económica continúe.
“¿Van a morir algunos? Van a morir, lo siento. Esta es la vida, esta es la realidad. No podemos detener una fábrica de autos porque hay 60.000 muertes de tráfico al año, ¿verdad?”, indicó.
Hoy Brasil es el segundo país con más casos de coronavirus en el mundo. En la nación sudamericana los registros llegan a 1.6 millones, mientras las muertes alcanzan los 65 mil.
NO SOY MESÍAS
Y en abril, cuando los fallecidos ya rozaban los 5,000 en Brasil, fueron varios los medios que salieron a criticar su gestión y su inacción frente a la pandemia. Lejos de mostrar empatía con los familiares de los muertos, Bolsonaro volvió a lucir desafiante. ¿Y qué? Lo lamento. ¿Qué quieren que haga qué? Soy Messias (su segundo nombre), pero no hago milagros”, comentó.
CLOROQUINA
“El que es de derecha, toma cloroquina; el que es de izquierda, toma Tubaína”. Con esas palabras Bolsonaro lanzó un dardo al gobernador de Sao Paulo, quien fue uno de los estados que ordenó la cuarenta en claro desafío al gobierno central. En su frase el mandatario hizo referencia a la popular gaseosa brasileña (tubaína) en contraposición a la cloroquina, medicamento que el gobierno brasileño defiende a pesa de que no está probada su eficacia y la OMS desalentó su empleo.
Fuente: Perú 21
